¿Qué importancia tiene ir un paso por delante? Mucha, si lo que buscamos es evitar cualquier fallo.
Durante la mecanización, un error en el corte puede suponer repetir todo el proceso, o lo que es más grave, un impacto en uno de los movimientos de la máquina. Eso conlleva un gran coste añadido en posibles reparaciones y en tiempos de parada de la maquinaria.
Gracias a los niveles más altos de automatización, somos capaces de simular con la tecnología 3D el proceso de mecanizado antes de iniciar el corte real. De esta manera nos aseguramos de que no se produzcan daños en las máquinas ni en las piezas de trabajo por una posible colisión entre los diferentes elementos.
Esta simulación se puede conseguir gracias a la función Collision Avoidance System (CAS) de Okuma, que, con la ayuda del potente control OSP, utiliza las especificaciones exactas de la máquina para evaluar previamente si el programa va a producir la pieza de trabajo tal y como la queremos, del modo más seguro, rápido y preciso.
¿Cómo funciona exactamente el CAS?
El software configura y simula los modelos que intervienen en el proceso de mecanizado antes de ejecutar la primera pieza. Posteriormente, se asegura de que el programa pueda ejecutarse sin colisiones, en ese momento se envía a la máquina real para que inicie el proceso sin necesidad de realizar más chequeos o simulaciones en vacío. De esta manera, conseguimos reducir los tiempos hasta en un 40%. Comprobar el mecanizado previamente desde el ordenador reduce el tiempo de preparación de pieza y lo hace de forma segura.
Es importante resaltar que el CAS realiza la simulación en el tiempo real de la operación antes de que empiece el proceso de mecanizado real, con una mínima o ninguna pérdida de tiempo. Siguiendo este patrón, las colisiones se pronostican a tiempo y el movimiento de la máquina se detiene antes de que pueda producirse un daño en la máquina. La aplicación comprueba y analiza el cero pieza y los correctores de herramienta con los valores reales de la máquina. En caso de detectar una colisión inminente, el movimiento se detiene. Esto permite al operador trabajar más rápido y seguro, maximizando así la productividad.
Otro factor a tener en cuenta, y que se ve implicado en este proceso, es la vida del husillo. Ésta mejora considerablemente, ya que no es necesario realizar manualmente un doble control de las posiciones ni reducir la velocidad cada vez que el husillo o la torreta se aproximan a la pieza. Si se prevé una colisión, los elementos que intervienen se resaltan en rojo en la pantalla para un análisis y solución de problemas rápidos y sencillos.
Fijarnos más allá del mecanizado, como es el riesgo de colisión, nos hará tener el control y la seguridad en todo el proceso de fabricación.